Estamos muy contentos de que nuestra hija participe en las actividades de la Vereda. Va allí con sus amigas, y disfruta a la vez que forja y madura su personalidad, en un ambiente lleno de valores. A la vez, las familias del Club participamos en actividades familiares que nos ayudan a conocernos entre nosotros y a formar parte del proyecto educativo.

El club no es una burbuja: prepara a las asociadas para tener sus propias convicciones y luchar por ellas con libertad y responsabilidad. En último término, las prepara para tener personalidad y no dejarse arrastrar por las mayorías, sino por convicciones.

Me gusta un montón venir a La Vereda, porque nada más pisar el club, te sientes como en tu segunda casa, es como una gran familia en la que todo el mundo se preocupa por ti. Y además, trabajamos, disfrutamos con planes divertidos... Un buen lugar para hacer verdaderas amigas.